domingo, 13 de marzo de 2011

CAPÍTULO 5: LA CHICA ALADA

Diego asimilaba cada vez mejor el alma de Gineon. Ahora se centraba en ver si podía  adquirir nuevos ataques. Todos los días por la tarde, si tenía tiempo, salía al parque a practicar. Había conseguido que la energía que rodea los lugares le sirviera de ataque. Diego le pregunto al ángel como podía suceder esto. Gineon le contestó que todos los objetos del mundo, todas las cosas, tienen una esencia sagrada. Los que se entrenaran a fondo podían ser capaces de manejar esa esencia sagrada y utilizarla en beneficio propio. Si realmente alguien estuviera en un apuro, esa esencia sagrada que reside en todas las cosas puede ayudarle, adquiriendo asi conciencia propia propia.
-¿Lo intentamos? - preguntó Gineon.
-De acuerdo - contestó Diego, de manera decisiva.
El chico se quedó de pie, en una zona del parque por la que apneas pasaba gente. Ese día en especial no pasaba nadie por el lugar, adecuado para la ocasión.
-Concéntrate - dijo Gineon.
Diego vació su mente, y la dejó en blanco. Lo que pretendía era sentir esa esencia sagrada e intentar reunirla en su mano. Solo sentía la brisa que corría y que hacía mover la hojas de los árboles. No se apreciaba ningún otro sonido. Sintió la energía sagrada del viento, de los árboles, la hierba, un afluente del río Guadalquivir, del mismo cielo azul que se mostraba por encima suya. Le producía un  estado de relajación que nunca había sentido. Intentó atrapar una parte de esa energía; no lo consiguió. Le faltaba práctica. Pero al menos ya sabía lo que sentía al dejarse llevar por la esencia sagrada que reside en todas las cosas.
Esta paz que reinaba en el ambiente se vio alterada por un demonio que tenía ánimo de romper cosas. Después de echar dos árboles abajo, Diego apareció delante suya.
-¡Me has echado a perder la concentración! - exclamó Diego,  a la vez que corría hacia el demonio - ¡RUPTURA DE TIERRA!
Finiquitó al demonio en pocos segundos. Diego respiró profundamente e intentó retomar esa profunda concentración en la que estaba metido. Consiguió tomar contacto otra vez con la energía sagrada. Pudo por fin concentrar una pequeña parte de esa energía en su mano, que brilló de tal manera que se comparaba con un rayo de luz solar. Intentó disparar esa energía pero se desvaneció. Diego lo intentó algunas veces más obteniendo el mismo resultado.
Cansado ya, después de unas tres horas fuera, decidió volver a su casa. Diego se encontraba motivado por el hecho de que puede haber sido el único humano que ha entrado en contacto con la esencia sagrada que reside en todas las cosas, pero un poco frustrado por no haber conseguido realizar ningún ataque con esa energía.
-Venga Diego. Confío en que lo conseguirás - le animó Gineon.
-Lo conseguiremos juntos ¿vale?
-Bien, pues vámonos.
Caminó unos 10 minutos y se detuvo en la puerta principal del parque; vio algo inimaginable: un águila imperial gigante surcaba los cielos. Sobre el ave iba una persona. De pronto se originó una poderosa corriente de aire.
-¿Quién será? - preguntó Diego.
No tengo idea - contestó Gineon, que  se quedó pensativo - ¡Espera! ¡Creo que ya lo tengo!
-Cuenta
-Me dijeron que posiblemente podrá verlos cuando me enviaron a esta zona. Se trata de un miembro del clan de Los Halconeros.
-¿Los Halconeros?
-Sí. Son hombres-pájaro para que lo entiendas. Gente que vive en islotes aéreos, solo visibles para gente con poderes.
-Es decir, tu y yo podríamos verles.
-Exacto. Las personas normales no pueden verlos. Ese águila imperial gigante que hemos visto hace un momento es el protector de los islotes aéreos, su guardián. Se dice que en menos de un día puede recorrer el mundo entero.
Diego se imaginó todos los lugares a los que podría ir si pudiera tratar con ese gran pájaro. Japón, Egipto, Canadá y otros muchos lugares que no podía ni imaginar. Territorios amplios un no descubiertos por el hombre.
Después de terminar de pensar, Diego cruzó la calle y entró por la puerta de su bloque. Cuando llegó a casa, su madre le preguntó si no tenía frío, debido a la corriente de aire que se había originado.
- *Que el resto de mortales no pueda ver al águila, no quiere decir que no sientan su rastro. Esa corriente de aire la originó el águila a su paso* - explicó Gineon, desde el interior de Diego.
- *Vale. Descansemos un poco. Por la noche saldremos a revisar si hay algún demonio suelto por ahí*
Diego se puso delante del ordenador para buscar unos datos para un trabajo que tenía que hacer para la asignatura de Informática. Al poco tiempo los guardó en su correo y luego empezó a hablar con gente por Tuenti. Pedro le decía que le trajera un cuaderno para copiar unos apuntes y Javi le hablaba de cualquier tontería. Como de costumbre, tenía puesta su lista de reproducción en Ares. Si un día no la pone es como si le faltara algo.
Así pasaron dos horas hasta que eran las 21:00. Sus hermanos pequeños se fueron a dormir, su padre se puso a ver las noticias y su madre estaba dejando la comida lista para el día siguiente. Diego se podía quedar levantado hasta tarde debido a que al día siguiente, Lunes, entraba a 2º hora porque faltaba una profesora.
Después de hacer la comida, la madre de Diego fue a ver una película que daban por televisión. Diego necesitaba una excusa para salir a patrullar.
-¡Mamá! Me ha llamado Javi diciendo que si podemos salir a dar una vuelta.
-No tardes mucho ¿vale?
Diego se fue con cierta prisa. Nada mas salir de su bloque fue andando por las calles hasta llegar a
Ronda de Pío XII. No encontró nada nada raro. Ni un solo demonio a la vista. Pero eso no iba a durar mucho tiempo. Cuando se aproximaba a los bloques cercanos al suyo, vio una sombra moverse. Una no, dos. Diego siguió esas sombras hasta que decidieron materializarse.
-¡Quita chico! - dijo uno de los demonios.
-¿No piensas o qué? ¡Mejor nos lo comemos! ¡Jajajajaja! - contestó el otro.
Pero no les dio tiempo a pensar como iban a atacar. Una onda energética que cortaba el viento en forma de cruz bajó rápidamente desde arriba, cortando por la mitad a los dos demonios a la vez.
- ¿Qué ha pasado? - preguntó Gineon.
Diego miró hacia todas partes. Quería encontrar a quién se había cargado a los demonios. No vio a nadie. Pero lo que no se esperaba es que fuera un ataque aéreo. Diego entonces reparó en ese detalle y observó al cielo. La luz de la Luna reflejaba la sombra de una persona... con alas.
-¿Quién eres tú? - preguntó el desconocido.
-Soy Diego. Alguien que se dedica a luchar contra los demonios.
-Eso lo decidiré yo - la voz era una voz femenina - Caerás antes las alas de Ahriel, líder de Los Halconeros.
Ahriel descendió en picado enarbolando una magnífica espada. Diego consiguió frenar el golpe deteniéndolo con su propia espada. Los aceros chocaron, pero Ahriel tenía ventaja, debido a sus alas. Diego saltó e intentó alcanzarla para darle una estocada desde arriba, pero una corriente de aire muy fuerte le frenó.
Era el águila de antes.
-¿Magnífico, verdad? ¡Roc, ataca! ¡VIENTO REAL!
Una poderosa corriente de aire de aire pilló a Diego, haciéndolo volar por los aires. La caída fue bastante dolorosa.
-¿Ya está? Pensaba que ibas a defenderte mejor.
-No estoy acabado. ¡Vamos Gineon! ¡ROMPE ROCAS!
Las rocas emergentes de la superficie terrestre volaron hacia su rival. Ahriel se protegió con sus alas, pero eso dejó que Diego se acercara peligrosamente.
-¡RUPTURA DE TIERRA! - gritaron Diego y Gineon a la vez.
El ataque no llegó a realizarse debido a otra intervención del Águila Imperial, que lo tumbó de nuevo.
-Esto no vale para nada. Roc, nos vamos.
Ahriel se elevó y se fue junto al águila. Diego se levantó después, dolorido.
-Nos han zurrado bien... - dijo Diego.
-Lo siento. He causado que tengas que luchar  y me siento culpable - respondió Gineon, apenado.
-No digas eso. Seguiremos entrenando. Verás como al final logramos dominar la esencia sagrada que reside en todas las cosas.
-Pero...
-¡Pero no! ¡Si estamos juntos es porque también yo acepté que entraras en mi cuerpo. Seguiremos unidos contra los demonios.
-Gracias.
-Venga. ¿Nos vamos?
Diego regresó a su casa, consciente de que tenía que dominar esa energía. Quería conseguirlo... para poder igualarse a Ahriel.

5 comentarios:

  1. vamos, que le han dado a Diego a base de bien...

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  2. Mee haa encantaadoo el finaal ^^ ha sido muy bonitoo (: pero pobre diegoo la que lee han dadoo xD

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  3. la historia en si parece interesante pro a mi m gustaria aparecer mas y no ablar tanto de ti ;)

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  4. jajajja adri?? xD
    Estoy de acuerdo, deberias profundizar mas en los personajes secundarios. Tambien estaría bien darle mas importancia a la historia en si (Gineon, combates....)q a la parte normal de la vida de diego (y eso que me encanta lo del tuenti y el parque miraflores xD, hacen la historia más realista). Cuando te vea te digo mas, sigue asi que vas muy bien :)

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